... Curate a vos mismo... ¿?

[Uds me dirán “Médico, cúrate a ti mismo” (Lc 4:23)] Eso dijo Jesús referente a hacer milagros en su propia tierra, y eso digo yo ahora referente a nosotros y nuestra actitud. Jesús fue el mas grande exponente de empatía que el mundo pudo conocer, el entregó su vida por la del resto del mundo, mas aún, se llevó en esa muerte todas las trasgresiones de la humanidad. Pienso ahora en el hilo que conduce la frase con lo anteriormente expuesto… Y quisiera escribir, entre otros, sobre la empatía.

Jesús tuvo en el contexto de esa frase que demostrar que hacía la voluntad de Dios, creo que el era el único capaz de hacer lo que hizo con los resultados que esto dio. Nadie, por mas bueno que fuera, podía tomar el lugar del hijo de Dios para semejante salvación, nadie mas perfecto, nadie con mas amor, nadie como El… Dios en semejanza de carne que le dicen, y es realmente asi.

Cuando ves gente de renombre, salados en sus áreas, referentes etc etc y ves que no están pasando su mejor momento quizás pensás “no, si este es un salado, no le puede estar pasando esto, y menos, tener la actitud que está teniendo…” Dejame confirmarte que son tan de carne y hueso como vos y yo, que tienen sus buenas y malas épocas, pero quiero destacar mas el punto de que acá también pensamos en “médico, cúrate a ti mismo” porque nadie puede estar pasando por ese momento de bajón, auto-diagnosticarse y llegar solo a la cura de lo que tiene.

La realidad es que desde el mas incomprendido hasta el mas afamado y aceptado tienen que afrontar sus valles de sombra de muerte… Y asi como vos y yo, ellos no pueden hacerlo solos. Sentite bien contigo mismo porque no hay distinciones. Alarmate porque tu mal rato lo tenés que pasar vos mismo, sin suplentes (pero con apoyos), porque nadie como vos para pasar por tu valle y después disfrutar de tu oasis.

Si estás bien, agradecé que lo estés, disfrutalo, no te pierdas ni un momento de este tiempo, pero mas allá de eso, lo que sí te pido es que al ver a alguien que no está pasándola bien, tengas empatía y puedas compartir de tu alegría con esa persona. No te sorprendas de lo mal que esté el otro, sorprendete de ser parte de su círculo de confianza siendo que se abra, no abundes en palabras, de ser posible, ahorrátelas... A veces mejor limitarse a oír lo que le ocurre a los demás.

Si estás mal, baja el orgullo al piso y subí las manos al cielo, es de lo mejor que hay. Te lo recomienda alguien que sabe de esto un poco, y al que le cuesta pero llega a hacerlo. Y si no llegaras, Dios hace que llegues en algún momento, garantizado. Sé valiente para confiar en tus amigos, ellos están representando a Jesús en ese momento, aún sin darse cuenta, asi como vos también lo hiciste tantas otras veces con ellos.

Empatía… Gran valor que en una sociedad egoísta no hace mas que engrandecer al ser humano. Gran valor que en las manos de Dios hace de uno siempre un dador, y uno que da mas de lo que imagina.

Gracias por tu tiempo!